Mapa Conceptual - Cómo Hacerlo en sólo 6 Pasos
Introducción sobre los Mapas Conceptuales
Al igual que un mapa mental, el mapa conceptual es una herramienta efectiva para facilitar el aprendizaje acerca de un determinado tópico, utilizando un esquema visual o diagrama que desglosa una idea central en distintas ramificaciones.
Esta técnica fue desarrollada por el profesor e investigador científico estadounidense Joseph Novak, quien basó su metodología en las teorías de aprendizaje significativo del psicólogo pedagogo David Ausubel, que se refieren a formas de adquirir conocimiento distintas a la memorización.
Utilidad de los Mapas Conceptuales
Uno de los elementos fundamentales del mapa conceptual es la capacidad de jerarquizar y organizar las ideas, desde una principal a un sinfín de ideas secundarias por medio de un diagrama y diversos elementos visuales, que permitirá modificar conceptos existentes y crear enlaces con nuevas definiciones, modificando nuestra estructura cognitiva y adaptándonos al principio de las teorías de Ausubel.
Así pues, un mapa conceptual es una técnica de aprendizaje que usamos para jerarquizar, especificar y sintetizar la información de un tema determinado, a travpes de un diagrama de nodos unidos entre sí con un sistema de redes.
A continuación te explicaremos detalladamente cómo elaborarlos paso a paso. Este artículo contiene muchos ejemplos que puedes presionar para agrandar y ver con mayor detalle.
Paso 1: Define el tema de tu Mapa Conceptual
Esta es la parte más importante, debes saber que los mapas conceptuales son muy versátiles, así que cuando tengas que elaborar uno debes plantearte esta pregunta; ¿qué quiero reflejar en mi mapa conceptual?
Esto significa hallar la pregunta de enfoque sobre la cual se basará tu trabajo, que se refiere a lo que el lector va a aprender efectivamente una vez que lea tu mapa conceptual.
Debido a que existen muchos caminos para desarrollar tu tema, enfócate en la idea principal del tema y en aquél que te permita sentirte satisfecho con la información que vas a transmitir y aprender.
Por ejemplo: si quieres hacer un mapa conceptual sobre la música, hay muchas maneras de abordarlo; hablar de géneros musicales, épocas musicales, su história, tendencias, artistas, instrumentos, etc.
Observa que en el ejemplo, el autor escogió como pregunta de enfoque “El Lenguaje Musical” lo cual de inmediato traslada al lector a un contexto específico, evitando así confusiones o ambigüedades.
Paso 2: Recopila toda la información necesaria
Dependiendo de qué tan complejo sea el tema, deberás buscar suficiente información sobre el mismo.
Si sueles utilizar internet como medio de investigación, te recomendamos visitar y comparar al menos 3 páginas web, para asegurarte de obtener información veraz, además que uno de los beneficios de los mapas conceptuales es que, mientras realizas la recopilación de información, tu cerebro ya está asimilando el contenido antes de plasmarlo.
Si se trata de un proyecto personal, o uno donde las ideas provienen de tu mente, asegúrate de recopilar también toda la información necesaria.
Léelo varias veces y trata de hacer un resumen de una página que refleje lo más importante. Tómate tu tiempo para este paso y no olvides ningún detalle.
Paso 3: Sintetiza y prioriza la información
Una vez que hayas hecho un resumen de toda la información que recopilaste, deberás ejercitar tu habilidad de síntesis para seleccionar únicamente los conceptos que consideres más importantes para explicar tu tema.
Una vez identificados, debes ordenarlos de acuerdo a su importancia.
Por ejemplo: Si tu mapa conceptual se trata sobre: ¿Cómo llevar una vida saludable?, debes comenzar con una idea general relacionada a la importancia del cuidado de nuestro cuerpo y espíritu, para luego enfocarte en qué tipo de hábitos mejoran la salud y a partir de allí comenzar a mencionar prácticas como el ejercicio, la adecuada alimentación, meditación, etc, es decir, debes comenzar de lo más general a lo más específico.
Una vez hecho esto, tendrás que afinar más tu capacidad cerebral de síntesis para resumir cada concepto de tu lista en una sola oración e incluso palabras claves que representen claramente la idea principal.
La idea es que con este resumen que estás elaborando, sintetices lo más que puedas la información, destacando únicamente lo esencial, que es lo que efectivamente el cerebro procesa y retiene por más tiempo.
El objetivo es que cualquier persona que lea tu mapa conceptual por primera vez, pueda entender lo que quieres transmitir con él.
Para asegurarte de haber hecho este paso correctamente, puedes pedir ayuda a un familiar o compañero para que lea tu lista de ideas ordenadas y te comente si entendió todo perfectamente.
Observa en este ejemplo los dos aspectos importantes que mencionamos sobre el orden de las ideas y su amplitud. Principalmente, al hablar del Sistema Solar, el autor comenzó refiriéndose a lo más general para ambientar a cualquier lector, conocedor o no conocedor del tema, antes de nombrar o enumerar los planetas.
Asimismo, nota como las frases son cortas y concisas, permitiendo definir perfectamente cada concepto con la información más importante.
Paso 4: Crea una lista de conceptos
- Selecciona los conceptos más relevantes del tema, es decir, aquellos que son necesarios para poder comprender el significado del texto, y colócalos en una lista.
- Luego ordena tu lista, sepáralos por área y por niveles de inclusividad (mayor, igual o menor inlcusividad), colocándo el más inclusivo y general al principio.
- Para determinar mejor el orden de los conceptos puedes analizar tu pregunta de enfoque, quizás puedas terminar modificando el tema central o escribir uno diferente. Revisa tu lista y agrega más conceptos si son necesarios.
Ya tienes toda la información para comenzar tu mapa conceptual, ahora puedes decidir entre hacerlo de forma manual, o visitar aquí y conocer algunos programas para elaborar mapas conceptuales que recomendamos para ti. Todo depende de cómo te sientas más cómodo y de cuánto tiempo tengas para realizarlo.
Recomendamos que apliques los dos métodos para detectar cuál es el que más te favorece y te genera mejores resultados.
Una vez creada tu lista de conceptos, debes ubicar el título de tu mapa conceptual dentro de un recuadro en la parte superior central de la hoja, como te mostramos en las imágenes anteriores.
El título se refiere al tema central de tu mapa conceptual o el concepto más importante a partir del cual desarrollarás el resto de las ideas.
Paso 5: Conecta las ideas
Ahora comienza trazando una línea recta a partir del recuadro del título, que conecte con el recuadro que contendrá la idea principal de tu mapa conceptual. Esta puede ser la definición más importante.
A partir del título coloca los conceptos más importantes arriba, normalmente suelen haber hasta tres conceptos generales en la parte superior del mapa, y debajo de ellos coloca los subconceptos correspondientes y de ésta forma ve desarrollando jerárquicamente tu lista de conceptos.
Une los conceptos mediante líneas conectora y palabras de enlace que deben explicar la relación entre esos conceptos que se unen.
Por ejemplo: si tu mapa conceptual se trata de “Estrategias para elevar el autoestima”, deberías definir “Autoestima” en primera instancia. Sobre la línea conectora debes escribir una palabra o verbo de enlace que permita al lector reconocer la relación entre el contenido de los recuadros; como por ejemplo: “es”, “consiste en”, “se clasifica en”, “permite”, esto se llama proposición o conectores.
Realiza esto con todas las ideas que previamente anotaste en tu resumen, en orden de importancia, hasta la parte inferior de la hoja.
En este ejemplo puedes observar mejor las proposiciones que mencionamos anteriormente; “lo hacemos”, “para”, “determinada por”, “modifican” etc. Éstas se encuentran ubicadas entre las líneas azules que conectan los distintos conceptos y es importante escribirlas fuera de los recuadros, para indicar claramente la interrelación entre las ideas.
Toma en cuenta que puedes relacionar la idea de un recuadro con otra en diferentes segmentos del mapa, solo debes cuidar que cada relación se identifique correctamente, separando los recuadros de manera adecuada e identificando correctamente las proposiciones para que no se genere ninguna confusión.
Nota cómo puedes realizar relaciones entre distintos segmentos de un mapa conceptual con este ejemplo sobre el “Aparato Digestivo”. El concepto “Jugos digestivos” está relacionado con las “Glándulas anejas” y el “Tubo digestivo” al mismo tiempo, por lo cual, en vez de repetir palabras, puedes incorporar una nueva línea conectora que denote esta relación a través de una proposición.
De esta forma es mucho más fácil recordar la información y puedes aprender cómo estan vinculadas varias partes de un todo.
Te recomendamos leer nuestro artículo: 7 Ejemplos de Mapas Conceptuales Efectivos, observando estos ejemplos podrás aprender cómo relacionar mejor las ideas.
Paso 6: Revisa tu mapa
Una vez que termines tu mapa conceptual, es recomendable repasar todo el contenido, leyéndolo varias veces para asegurarte que las relaciones entre las ideas se hicieron correctamente, y que todo el contenido tiene sentido y orden lógico.
No importa si tu primer intento no resultó como esperabas, siempre puedes reorganizar todo y afinar detalles, agregar o suprimir ideas hasta que quede perfecto y, lo más importante es que al leerlo, toda la información importante se vea reflejada y se entienda, por lo cual puedes pedir la opinión de un tercero para asegurarte que está todo en orden.
En este mapa conceptual, el autor explicó lo más importante y enfocó su mapa en la información que deseaba transmitir. También puedes observar cómo en el apartado “¿De dónde viene el nombre de las notas? “ coloca la palabra “Origen” seguido de material multimedia adjunto que puede ser un video o imágenes, lo cual es una gran ventaja si deseas elaborar tu mapa conceptual en forma digital.
Finalmente, independientemente del uso que le des a los mapas conceptuales, evalúa los resultados que obtuviste, si comprendiste efectivamente el contenido para un examen, o si el público comprendió el mensaje transmitido en caso de haberlo empleado en alguna exposición.
Es importante que hagas un seguimiento de los resultados para identificar qué puedes mejorar de cada mapa conceptual y hacerlos cada vez más concisos.
Recomendaciones para la elaboración de un Mapa Conceptual
- Comprensión del tema: Lee cuidadosamente el texto que usarás para realizar un mapa conceptual, con todos sus aspectos hasta que tengas un buen dominio sobre el tópico que generará tu idea central.
- Extrae la idea principal del mapa y crea una conexión con ella; es la base para crear conceptos relacionados.
- Palabras clave: A medida que leas todo lo referente al tema, tendrás la capacidad de percibir palabras que resultarán fundamentales para determinar los conceptos en tu diagrama. Resáltalas para luego desarrollar sobre ellas.
- Jerarquización: Con pleno entendimiento del tema, ordena desde mayor a menor importancia para idear un boceto de tu gráfica.
- Relación entre conceptos: Determina si hay nexos entre los conceptos o palabras clave.
- Una vez descubierta la relación entre conceptos, es momento de vincular según su jerarquización.
- Todo parte de un texto previamente leído, así que no deseches ninguna de tus ideas, podrían ser de utilidad.
- La idea de un mapa conceptual es simplificar el aprendizaje, así que no es conveniente conceptos de gran extensión.
- Al igual que se deben simplificar los conceptos, es necesario no extender las ramificaciones más allá de lo necesario, para no recargar el mapa conceptual.
- Si es necesario el uso de la tecnología, prepara tu mapa conceptual en físico como forma de ensayo, para luego trasladarlo al software o aplicación de tu preferencia.